Cuando el Maestro gobierna,
la gente apenas percibe su existencia.
Inferior gobernante es aquel que es amado.
Inferior más aún el que es temido.
El peor, el despreciado.
Si no confías en la gente,
la gente pierde su confianza.
El Maestro no habla; actúa.
Cuando su tarea concluye,
la gente dice: “asombroso: ¡lo hicimos nosotros solos!”
Verso nº 17 del Tao […]